Las diferentes características geográficas de los municipios que conforman la MMS originan unas materias primas singulares que unidas a unos métodos tradicionales de elaboración, dan lugar a una exquisita gastronomía.
En nuestros municipios costeros podemos saborear exquisitos pescados y mariscos procedentes de las aguas del Cantábrico. Actualmente, en Noja, Isla y Suances se celebran al menos una vez al año las jornadas del marisco, habiéndose especializado cada pueblo en un producto concreto, como es el caso de la afamada langosta en Isla o las nécoras en Noja. Así mismo, animamos a degustar platos típicos de las villas marineras (Suances, Santoña, Colindres y Laredo) como el verdel en sus múltiples variantes, además del marmite y el pollo marino, cuyo ingrediente principal es el bonito. Sin olvidarnos de paladear las célebres anchoas de Santoña y sabrosos pescados como la lubina, el rodaballo, el jargo, el lenguado.
Afamados son también los pescados obtenidos en los ríos Pas y Asón, la trucha, el salmón y las angulas. Además de los moluscos recogidos en los municipios adyacentes a la marisma de Santoña, Victoria y Joyel, como las almejas y las navajas, conocidas localmente como muergos.
Los municipios de Ramales, Rasines, Liendo y Polanco se caracterizan por la calidad de su carne y por sus platos de cuchara tradicionales.
De las huertas se extraen los populares pimientos en Isla y los respigos en Laredo, con el que se hace un plato muy apreciado.
Todos estos alimentos pueden ser acompañados por diferentes bebidas de la zona como la cerveza de Ampuero, la sidra en Escalante y el vino en Voto.
Por último finalizaremos con la degustación de riquísimos postres como el queso fresco de Las Garmillas en Ampuero o el chocolate con picatostes de Limpias.